La sección "contrabandistas escribiendo" hace hoy un hueco a una persona que transmite mucho con sus palabras. Gracias de corazón por regalar este texto al blog. Esta caricia será guardada y servirá de guía para muchas personas que quieran ayudar a otros, simplemente seleccionando en el repertorio de Rulo y la Contrabanda la mejor canción para animar a aquel que tenga sus sonrisas en depresión.
Aquí os dejo el bonito y emotivo texto de SurAzul, escrito con una calidad de impresión.
Dos besos y un ‘hasta la vista’ fueron para él suficiente final a 8 meses de relación. Una nueva y brillante vida le esperaba al amanecer del siguiente día. Atrás quedaría esa otra en la que no encajaba, esa vida que no deseaba. Quería borrar todo recuerdo de los años en los que no pudo encontrarse a sí mismo, desprenderse de su vieja y desgastada piel y comenzar de cero, en otro país. Entre los escombros de esa vida se encontraba ella, leyendo en soledad el manual de los olvidos. Muchas noches y sus días deberían aún pasar por su reloj antes de ver difuminarse los recuerdos mentirosos, las promesas por cumplir y las grietas de un corazón cerrado por derribo.
Los amigos, como la sangre, acuden a la herida sin que se les llame. No le conocía de mucho tiempo atrás, pero él supo entender lo que ella trataba de ocultar, que la tristeza le robaba la sonrisa y la ilusión. Como único recurso en la distancia, le pasó dos canciones para intentar devolverle la primavera. Ella no conocía el grupo, pero todo lo nuevo era bienvenido. Comenzó a sonar ‘En Vela’. Las palabras inundaron sus sentidos, ahogando el dolor hasta hacerlo desaparecer. Dicen que, tras pasar por una experiencia traumática, ayuda plasmar en papel el suceso. Resulta sorprendente hasta qué punto ayuda escuchar tu propia experiencia en voz de otro. A continuación comenzó a sonar ‘P’aquí, pallá’ cerrando las heridas, dejando entrar aire nuevo, ganas de seguir y desafiar a las penas en un duelo que estaba segura de ganar.
Fue un flechazo, y la necesidad de más de aquella música desplazó a la autocompasión. En pocas semanas ya había escuchado varias canciones, y cada una le ponía los pelos de punta. Las guitarras, la armónica, pero sobretodo esa voz. Meses mas tarde la noticia cayó como un saco de cemento: el grupo se separaba, ya no volvería a escuchar esa voz que le calaba hasta la última célula. La maldición parecía repetirse, pues ya le había sucedido algo similar con ‘Los Secretos’: al poco de conocer la voz rota de Enrique Urquijo, una muerte prematura le encontró en un portal de Madrid.
Afortunadamente, ‘hay llamas que apaga ni la peor de las tormentas’, y meses mas tarde, la voz de Rulo asomaba al panorama musical con su nueva formación. Era una segunda oportunidad, nuevas canciones, mas madera. Desde entonces, la voz de Rulo y las notas de la Contrabanda han estado presentes en mis viajes, en el trabajo, en la soledad y en las alegrías. Leer vuestras andanzas es la parte dulce del día. La ilusión la ponen los conciertos, las ganas de cantar con vosotros esas letras que me estudio para ‘llevar hechos los deberes’ cuando nos tomes la lección en Granada en Marzo. Allí estaremos, para calentar el alma.
Gracias por seguir adelante, sois el motor de muchas cabecitas locas.
Increible...solo puedo decir eso, me que quedado sin palabras...
ResponderEliminarParece que detrás de la música de Rulo, siempre hay una historia triste, casi siempre con final feliz, asi que , que más se puede decir...
ResponderEliminarComo ya dije, su música es nuestro bálsamo cicatrizante...
Precioso tu texto SurAzul, gracias por demostrarme que con líneas como éstas, aún se puede arrugar mi corazón, aunque esté contento!!
Que su arte siga curando nuestras heridas!!
Un abrazo,
Rebeca.
Simplemente no lo podria explicar mejor tu!! impresionante
ResponderEliminarSe dice siempre que estas historias pasan todos los dias y cierto es , pero como jode cuando eres tu el protagonista ...
ResponderEliminarSolo decirte que si este texto fuese dirigido a mi, me sentiria plenamente satisfecha y muy orgullosa , sentirìa que merece la pena seguir escribiendo y grande la recompensa , creo que es una de las cosas mas bonitas que podrìan decirme...
Mer
Precioso. :)
ResponderEliminarRosa